jueves, 5 de septiembre de 2013

Without Condiments

Creo que tengo un nivel aceptable de Inglés. Puedo mantener una conversación no muy fluida pero entendible a un ritmo normal con cualquiera que quiera hablarme o si necesito pedir algo. Pero en Francia, no me sirvió.


Antes que nada acordate que jamás en tu vida discutiste algo. No sos de ese estilo. Un “2” es un “2” siempre. El que te evaluó sabe más que vos. E ir a pelear una guerra que te sabés perdedor, te pone de muy mal humor y si la podés evitar, la evitás (ya te vas a acordar por qué).

Tu primer día en París fue a pura intuición. Fuiste a desayunar, pediste un “Black Coffe”, te lo sirvieron en un vasito de pitufos, y te dieron la medida de las tapitas de jarabe.
Después quisiste sacar el pase del día en el subte y te vendieron un solo boleto. Lo pediste en inglés y claramente no te entendieron (no viene al caso pero en Paris no hay molinete, hay puertas mecánicas que se abren con la tarjetita. Casi te la das de lleno después de que pasó Lau).

Empezaste a desistir de pedirle ayuda a aquellos oriundos de la tierra de Zidane. Tomaste un mapa y no te fue difícil encontrar lo que necesitabas.

Pero llegó la noche, con una lija bárbara (cuando no), y te empezaste a preguntar qué cenar. Ahí fue que divisaste esa “M” gigante, amarilla, brillante, curvilínea, que en todos los lugares del mundo significa lo mismo “Mc Donalds” y ahí fueron.

Llegaste a la fila y casi por reflejo miraste hacia arriba buscando las imágenes que te dirían qué elegir.

- Yo voy a querer un Big Mac.

Dijo Lau. Claramente, Big Mac también significa lo mismo universalmente.
Yo busqué mi “Doble cuarto de libra con queso sin condimento con papas y gaseosas grandes” pero no la encontré. Ahí empezó el problema.
En la mesa donde están las servilletas y los sorbetes, estaban todas las hamburguesas posibles y ahí la ví: Double CheeseBurguer.

Encaré la caja y …

- Hola (ni Inglés, ni Frances, un simple “Hola” que le hiciera notar que soy de muy lejos).
- Bonjour (creo)
- I’d like to order one Combo Big Mac and one Double Cheeseburguer without condiments.
- Ok One Combo Big Mac and…

Y me puso cara de no entender.

- One Double Cheeseburguer without condiments.

Volvió a mirarme con cara de no entender y se quedó en silencio.

- Without condiments. No souces (mientras ponía una palma horizontal y le hacía con los dedos de la otra, gestitos de lluvia a la palma).
- Ahhhhhh, “#”#%&!!!!$&&(&% (eso representaría que no sé lo que me respondió).

Yo asumí que mis gestos fueron lo suficientemente claros, sonreí y…

- Wi wi.

Pasaron cinco minutos y empiezan a armar la bandeja. Ponen la caja del Big Mac, ponen una coca, unas papas y la caja de la doble hamburguesa con queso. Ahí noto que mis papas y mi gaseosa no estaban.

- Ehhhh, mis french fries and coke.
- No, no.

Y me muestra el ticket. Me había cobrado solo la hamburguesa, no el combo. Discutir era al pedo. No me entendía, no la entendía, me resigné y nos fuimos con Lau a una mesa (que sonreía como si ella hubiese ganado al haber elegido el Big Mac).
Ella agarró su caja, lo abrió y ahí estaba él. Reluciente, esperando ser comido.
Yo agarré mi caja, recuerdo que la levanté y la noté liviana. No me importó. La abrí, miré por la ventana y mordí.

La puta que la remil parió. La salsa estaba ahí. Abrí los dos panes y ahí lo ví. O mejor dicho, no los ví: Faltaban las hamburguesas. Pan, salsa de esa que no quería, queso y ¡¡¡faltaban las hamburguesas!!!.

Imaginate que si no lograste que entendiera que lo que no querías era la salsa y te sacó las hamburguesas, ir a reclamar hubiese sido una pérdida de tiempo porque no sabías como explicar lo que había pasado. Limpiaste como pudiste la salsa de los dos panes y te comiste un sándwich de queso “tomatizado”. Una nueva derrota para lucir en tu palmar.

PD: Hablando de viajes, no entiendo por qué aplaudimos al piloto de un avión cuando aterriza. Yo no recuerdo haber aplaudido jamás a un taxista cuando me deja en Cordoba y Suipacha, o al maquinista del subte cada vez que abre las puertas en Diagonal Norte. ¿Por qué aplaudimos entonces al piloto? Aterrizar es SU OBLIGACIÓN. No lo hizo de copado, ni por cortesía. Lo hizo simplemente porque si él no aterriza, él también se muere!! 

3 comentarios:

  1. Curiosidades del idioma: Grupo de alemanes visitando el país. Yo de alemán, cero. Ellos de español, menos. Pichuleábamos entre todos un inglés horrible. Parrilla argentina en la que yo oficiaba de nexo entre los extranjeros y el mozo. Champagne para arrancar, vino para el asado, más champagne para el postre. Después de semejante atracón, empiezan a pedirme algo para "bajar" lo ingerido. Lo que tomamos todos para hacer la digestión. Y ahí nomás, encargué cerca de 20 tecitos de boldo. Me sentía la mejor anfitriona del mundo. La embajadora de la cordialidad nacional. En enero. Los tipos querían ginebra. Imaginate.

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  2. Esta vez SOLO tuve que escribir 2 veces el comentario. Bien ahí.

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  3. Me imagino la cara de los 20 cuando recibieron las tasas con el saquito y el agua caliente. Jaja!!!!

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